
Título: En pie de guerra
Autor: Carlos Cuauhtémoc
Sánchez
Año: Se terminó de escribir
en septiembre del año2006
Nacionalidad: México
N° de páginas: 221
Género: novela
EN PIE DE GUERRA
1. Metanfetaminas
Las anfetaminas o
metanfetaminas tuvieron aplicaciones médicas hace años. Hoy son recetadas ante
enfermedades muy específicas y bajo estricto control médico. Los kamikazes
japoneses las usaban en la guerra para darse valor. Se consiguen en comprimidos
o en polvos que se inyecta, fuma o toma. La droga roba al cuerpo la energía que
tiene en reserva, acelera las funciones produciendo sensación de fuerza y
autoestima; genera ideas rápidas y facilidad de palabra; quita el hambre y el
sueño somete a un sobresfuerzo al corazón, y cuando su efecto pasa, el
organismo que ha sido exprimido de forma abusiva, cae en un agotamiento
extremo, la persona se siente triste, desconfiada y deseosa de tomar más droga.
En muchos aspectos, incluyendo la adición psicológica que produce, la
metanfetamina se parece a la cocaína, solo que es más barata.
2. Popper
Son amarillos; a veces se
venden en tiendas de sexo; tienen olor dulce y frutal. Cuando respiras tus
vapores te pones alegre y te existas sexualmente, por desgracia también produce
taquicardia, dolor de cabeza, vómitos y a veces desmayos. Los efectos duran
poco después de rato te sientes muy cansado y deprimido. Los Popper ocasionan
adicción física. O sea que quien los usan se vuelven locos si se los quitan.
3. GHB
Gamahidroxibutirato. Un
líquido sin color ni sabor sintetizado a partir de una sustancia química con la
que se limpian circuitos eléctricos. Se ha usado como pre-anestésico y como
estimulante hormonal para aumentar el volumen de los músculos, pero a hora, es
una sustancia prohibida. Algunos le dicen éxtasis líquido, aunque no tiene nada
que ver con la droga llamada éxtasis. También le llaman liquido X, gama y
gama-O. un poco de GHB produce borrachera, la persona se siente alegre,
eufórica y sin inhibiciones, por eso es común el consumo en fiestas y antros. A
los homosexuales les encanta, porque dicen que quienes lo toman se vuelven más
sensuales también lo usan las parejas para bailar y moverse con “soltura” quien
toma GHB se olvida de sus preocupaciones. Al día siguiente no sienten debilidad
o resaca; por el contrario, muchos hablan de una sensación de frescura y hasta
mayor energía. El peligro verdadero del GHB consiste en que nunca se sabe cuál
es la dosis que se está tomando. En frasco de lo que se venden en la calle puede
a ver solo cuatro gramos, que ocasionan mareo, mientras en otro frasco con la
misma cantidad de líquido podría haber hasta treinta gramos de droga, cantidad
suficiente para ocasionar una sobredosis. El GHB tiene efectos impredecibles;
varían entre las personas cuando se usa con alcohol, puede ser fatal…. Pero aun,
por si sola, en dosis altas, ocasiona ansiedad, temblores, sudoración, dolor de
cabezas vómitos, espasmos, convulsiones, perdida de conciencia, paro
respiratorio y estado de coma por depresión del sistema nervioso central.
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